La Municipalidad de Ayacucho y la Unión de Artesanos organizan una jornada de degustación y venta de repostería criolla, junto con una feria artesanal y espectáculos musicales. Lo principal de esta fiesta son los manjares camperos: pastelitos, panqueques, alfajores y tortas fritas.
En el predio de una escuela o club local se disponen largas mesas donde se exponen las delicias elaboradas por los reposteros y reposteras de Ayacucho. De entrada libre y gratuita, esta fiesta declarada de Interés Turístico Provincial ofrece una degustación de distintas delicias de la cocina argentina. La repostería criolla es una de las especialidades de la cocina tradicional del país, y sus exponentes son muchos y variados: alfajores, bocaditos dulces, bizcochos para el mate, panes y licores en sus distintas variantes según la tradición local. En los festejos reina un clima tradicionalista que se propone celebrar lo mejor de la cultura local. La Biblioteca Municipal de Ayacucho cuenta con ejemplares de libros de repostería criolla, y todos los vecinos están invitados a participar.
La fiesta comenzó a organizarse en 2003, pero fue interrumpida unos años más tarde, retomándose en 2013 por iniciativa de la Unión de Artesanos. Además de la degustación y venta de los productos gastronómicos hay exposición de artesanías, certamen de cebadores de mate y charlas sobre repostería. El cierre de las jornadas está a cargo de los artistas, generalmente intérpretes folklóricos locales e invitados.
Ayacucho es una ciudad del centro-este de la provincia de Buenos Aires, en la región conocida como “Pampa deprimida”, al noreste de las Sierras de Tandilia. El partido de Ayacucho, del cual es la ciudad cabecera, fue creado en 1865 y su nombre refiere a una batalla librada en el marco de las guerras de independencia. Se trataba ya desde ese momento de una región ganadera y agrícola, y las primeras estancias preceden a la fundación del pueblo. Durante las últimas décadas del siglo XIX y las primeras del XX esta actividad se desarrolló a ritmo galopante, fomentando el poblamiento y el desarrollo de la región.
Ayacucho es la tierra del Martín Fierro, es la única referencia espacial explícita incluida en la famosa obra de José Hernández. La literatura gauchesca inmortalizó a Ayacucho como un espacio de tradición, que se mantiene viva en la cultura de la ciudad y también, como podemos observar en esta fiesta provincial, en su gastronomía criolla.