Es una fiesta anual que se celebra durante la primera quincena de diciembre y tiene la finalidad de conmemorar a la Santa Patrona de la región.
Desde la construcción de la capilla hubo celebraciones patronales, y fueron las mismas familias que instauraron el culto las que realizaban todos los años una fiesta en su honor. En aquellos primeros tiempos se comenzó realizando el característico novenario, acompañado de misa y procesión. Pero esas actividades cobraron mayor impulso cuando se bautizó al nuevo departamento con el nombre de Santa Lucía. Así, a las celebraciones se le incorporaron actividades de orden no religioso, como juegos, consumo de comidas y bebidas tradicionales, quermeses, fuegos artificiales y baile social.
La gran celebración de la Fiesta de Santa Lucía tal como se la conoce hoy, data de la década del 70. En 1991 fue declarada Fiesta Nacional y está auspiciada por el Gobierno de la Provincia, a través de la Secretaría de Estado de Turismo, Cultura y Medio Ambiente de San Juan. Goza de gran apoyo popular, ya que une lo estrictamente religioso al realizarse la novena y misas en honor a la santa, acompañadas y aderezadas con cuatro noches de danzas, cantos, ranchos tradicionales con comidas típicas, exposición de artesanías e industrias, y un amplio. programa cultural. En el escenario mayor del evento que se denomina “Santiago Paredes”, en homenaje a un pintor oriundo de la comarca, se hacen presentes importantes músicos de renombre local, de otras provincias y de los países limítrofes.
El número de asistentes a estas Fiestas aumenta año tras año, alcanzando una cifra cercana a las 40.000 personas. La entrada es libre y gratuita. El espectáculo artístico ha ido creciendo con la participación de grandes figuras nacionales e incluso internacionales.
Santa Lucía, situada en la provincia de San Juan y fundada el 4 de diciembre de 1869, es la localidad cabecera del departamento homónimo que forma parte del Gran San Juan, es decir del conurbano de la capital provincial. Los orígenes de su poblamiento remiten a fines del siglo XVI, cuando una crecida del río San Juan, obligó a los habitantes de San Juan de la Frontera a trasladarse al este de la ciudad, donde las tierras eran más altas.
La genealogía del nombre deviene de la Parroquia de Santa Lucía. La familia Pereira- Irrazábal, propietaria de los terrenos, edificó en el siglo XIX una capilla en la memoria de Lucía de Siracusa que fuera degollada por orden del gobernador, en la Italia del siglo III, por practicar el cristianismo. Por ello fue convertida en mártir y es considerada protectora de la vista. El templo original fue destruido por un terremoto en 1894. En 1900 se construyó un nuevo edificio que, posteriormente, en el año 1907 ascendería al rango de Parroquia.
A esta ciudad se la conoce como “el Portal de San Juan” porque es la vía principal de entrada a la Ciudad de San Juan. La región es rica en plantaciones de vid, frutas y hortalizas, que conforman la industria local, Bodegas vitivinícolas y la elaboración de dulces de excelente calidad.